martes, 26 de agosto de 2008

Cosas que hacer antes de morir.



Tengo pensadas muchas cosas que debo hacer antes de morir para poder descansar en paz. La verdad es que ser rica no consta entre ellas. Pienso que el dinero no da la felicidad... pero reconozco que ayuda a conseguirla. Diré (me veo obligada a decir) que no comprendo a la gente cuya única meta es amasar una inmensa fortuna y guardarla en una cueva para irla engordando. Me parece de una pobreza de espíritu tremenda. También hay que reconocer que, en este mundo regido por el maldito capitalismo, sin moneditas ni papelitos verdes no vas a ninguna parte.

Pero yo no venía a hablar sobre el euro ni la crisis ni nada de eso. Soy demasiado pequeña y desconozco demasiadas cosas para entender la economía y la política de mi país, y no digamos la del mundo. Me molesta mucho pensar que, para que mi alma "suba al cielo" a cantar saetas con los angelitos, vaya a necesitar una montaña de oro. ¿Que me estoy contradiciendo? Así es, pero no tanto.

De pequeña decía que lo primero que haría cuando fuese mayor de edad sería dar la vuelta al mundo (que ironía, puesto que últimamente solo me apetece quedarme en casa). Bueno, ya sabéis que para un niño eso de ser rico significa poder comprarte una bolsa de chicles, caramelos y gominolas en cada esquina. El caso es que sigo manteniéndolo.
Creo que el viajar es la experiencia que más enriquece el alma de una persona. No limitarse a viajar a lugares seguros cuyos habitantes vivan como nosotros, que también está muy bien. No limitarse a irse a las Fiji para tomar el sol en una playa paradisíaca. No limitarse a ir del hotel al restaurante, del restaurante a la playa, de la playa a la discoteca. No.

Si algo he aprendido en la asignatura de historia del arte es lo que ha cambiado el ser humano, no solo en un espacio temporal, sino en un espacio de kilómetros, metros y centímetros. Una misma persona puede mostrar su personalidad de una forma aquí, y en su pueblo ser completamente distinto. He visto (conmigo incluída) muchos ejemplos de esto, y creo que es verdad.

Lo que debo hacer antes de morir es ver el mundo. No puedo irme de aquí sin haber visto sus maravillas. El Taj Mahal, Notre Dame, La Gran Muralla, el Amazonas, los fiordos noruegos, una sabana en África, los Dolmen, los bosques del este, Egipto, Venecia, Roma, Nueva Zelanda, Cuba, Rusia, la India...

no puedo morirme sin ver las maravillas del planeta.
no puedo morirme sin entender las distintas culturas.
no puedo morirme sin comprender la sonrisa de un niño africano.
no puedo morirme sin pasear en un bosque a la luz de la luna.
no puedo morirme sin ver el horizonte desde lo más alto de un cañón.
no puedo morirme sin nadar en las aguas del pacífico.
no puedo morirme sin ver los cultivos de arroz en China.
no puedo morirme sin ver las pirámides mayas o egipcias.
no puedo morirme aún.

...Son muchos más los tesoros
de los que se podrán descubrir...

4 comentarios! =D:

Sashka dijo...

Muchas cosas que hacer...
muchas que tienes pendientes
y muchas que harás sin haberlo planeado.

Hay tiempo para todo
y son esos matices y esos momentitos los que nos nutren y nos forjan...

un saludo :)

Anónimo dijo...

depende que tipo de vida quieres tener, hay un dicho que dice "para ser inmortal, lleva una vida memorable", las carreras, el espiritu, la voluntad todas esas cosas siempre estan para formarnos de una manera u otra, tienes suerte de no tener deseos monetaristas -entiendase por juntar montañas de oro o convertir el plomo en doradito-, y como dice una frase muy celebre, la vida no se cuenta por las veces que respiras, si no por los momentos que te quitan el aliento.

Asi que a buscar esos momentos, yo los encuentro cada dia en el gym XD! Saludos desde Perú. Matta-nee!

Sashka dijo...

:)

Sigo perdida
no paro mucho
pero me encanta que me leas...

un saludo

Rhaegar Targaryen dijo...

Interesante tu lista. Yo añadirnia ver salir el sol desde lo alto de una montaña (no hace falta que sea muy alta) sobre el mar.
Un saludo.